TENDENCIAS
Revista de la Facultad de Ciencias
Económicas y Administrativas.
Universidad de Nariño
Vol. XVI. No.  2 – 2do. Semestre 2015

 

ALAS PARA VOLAR

Por: Carlos Patiño Bucheli*

En 1984 se estrenó la película Birdy1, Alas de Libertad,  del famoso  productor Británico Alan  Parker,  que  contaba la historia de  un  adolescente de  Philadelfia quien tenía  unos  deseos irresistibles de volar. Traigo a mi mente este filme porque recuerdo vagamente varias  de las cosas que el protagonista hacía, en su intento de volar,  aún  poniendo su vida  en peligro. La película, la universidad y la vida  me han  dejado  enseñanzas que nos dan  la fuerza  para  “volar” y las quiero compartir a través  de este escrito. Primero miremos porqué no podemos volar,  no en el sen- tido físico sino en lo metafórico, hacia  unas metas, hacia  unos  sueños: Como dice Borja Vilasec2, escritor español, en su fascinante libro El sinsentido común, desde nuestro nacimiento ya venimos predestinados a no volar debido al determinismo y condicionamiento social que nos dice que “no podemos”, que “no somos capaces”, que  “no debemos”, que  hacen que  nuestra zona  de confort vaya creciendo fuerte como una  caparazón que nos acompaña en la vida con la creencia que todo lo que pensemos y hagamos debe tener  la garantía de darnos seguridad y no avanzar más allá de esta  zona.  Dice Vilasec:  “… Al no saber  quienes somos,  nuestra forma  de pensar y de comportarnos se asemeja mucho al del grupo  social  y cultural al que pertenecemos. No tenemos identidad propia, vivimos tiranizados por el miedo  y la inseguridad, y además nos infravaloramos.
Debido a esta falta de autoestima, somos obedientes y sumisos, conformándonos con el modo  de vivir establecido por el statu quo…”. Padres, educadores, vecinos, amigos,  se encargan de ir moldeando esa zona  de seguridad y de confort, y nos sentimos “bien”  y vamos  caminando en la misma marcha de miles,  millones de personas, asegurándonos de no salirnos de todo aquello que nos brinda seguridad y confort, sin volar. Cuando llegamos a la empresa seguimos persiguiendo seguridad que nos brinda la compañía, el salario, los horarios, las órdenes de los superiores, perpetuándose la dependencia de factores externos que nos impiden volar. Todas las creencias y experiencias nos han formado una cultura de seguridad dependiente de factores externos a nosotros mismos. William F.Bohan3, en su libro El poder Oculto de la Productividad, expresa que  hay  tres  factores principales por  los cuales las personas en las empresas no pueden desarrollar todo su potencial, léase volar: El temor  al fracaso, creer  que no puede y los procesos y procedimientos deficientes y si a esto  le sumamos que  desde hace  siglos,  la empresa nació  con  dos  actores diametralmente opuestos que a lo largo del tiempo han  tomado diversos nombres y connotaciones diferentes: amo y esclavo, siervo  y señor, jefe y subordinado, tra- bajador y empleador y, últimamente, gerente y colaborador, todas  ellas guardando una  profunda distancia debido a que  el paradigma reinante es que  unos  piensan y los demás hacen lo que los otros  piensan. A esta dialéctica Malcolm Gladwell4, en su libro David y Goliat llama  “nosotros”, refiriéndose a los jefes, supervisores o gerentes, y “los otros” a los trabajadores, quienes solo deben ocuparse de cumplir con  unas órdenes impartidas previamente programadas por  quienes se suponen pueden hacerlo, limitando el potencial de las personas, la creatividad; es decir, limitando la facultad de volar.
¿Qué necesitamos hacer para romper estas cadenas que nos atan y nos impiden desplegar nuestras alas para  volar?  Jalil Gibrán  dijo: “La mayoría de las personas que ansían la libertad no quieren renunciar a sus cadenas”. De la revisión de va- rios autores ocupados por encontrar la mejor forma de hacer crecer  a las personas, puedo compartir algunos conceptos: Brian  Tracy5,  en su libro  Plan de Vuelo,  nos orienta en cómo lograr nuestras metas más rápido de lo que pensamos, a través  de definir metas específicas y de ejecutar todas  las acciones necesarias sobre  la base que tenemos el potencial para ello. ¿Cómo fortalecer ese potencial? Teniendo plena conciencia que la posibilidad de fracaso  siempre estará presente, y una  de las for- mas para disminuirlo es la formación continua, el estudio permanente. Capacitarse es la mejor  forma  para  vencer el temor, pero  también siendo persistente. Hoy ya no es una  ventaja haber cursado una  carrera profesional, se necesita capacitarse a nivel  de especialización, maestría y doctorado, y hablar dos o más idiomas. Sin embargo, es el conocimiento y fortalecimiento interior, como  lo propuso Jesús, Sócrates, Aristóteles, lo que nos permitirá desarrollar nuestro potencial y nuestra capacidad para  volar.  Sun  Tzu,  250 A.C, escribió su famoso  escrito El Arte de la Guerra6,  en donde se destacan las cualidades que  toda  persona que  quiera volar debe tener:  Disciplina, conocimiento, sabiduría, coraje, humildad y benevolencia. Esto hará que salgamos de nuestra zona de seguridad o de confort y el premio será la conquista de nuevos espacios, nuevas experiencias, el crecimiento personal.
Son precisamente estos factores los que han  hecho que países aún  más peque- ños y con  menos recursos naturales que  Colombia como  Japón,  Israel,  Corea  del Sur, se muestren hoy como países innovadores y con gran desarrollo tecnológico; Son  países que  aprendieron a volar  porque sus  habitantes desplegaron sus  alas. Andrés Oppenheimer7, escritor argentino, en su libro  Crear o morir  destaca que infortunadamente América latina se encuentra atrasada en innovación y creatividad porque el temor  al fracaso  es más fuerte que la satisfacción de lograr  un empren- dimiento. Destaca  en su libro  como  los innovadores de Silicon Valley  hacen del fracaso  una  verdadera oportunidad para  triunfar y lograr  la excelencia. Malcolm Gladwell8, en su libro Outliers - Fuera de Serie, resalta la persistencia y disciplina como  dos variables importantes para  lograr  el éxito,  citando como  ejemplo a Bill Gates  o Steve  Jobs quienes fracasaron en varias  oportunidades y aún  así dedica- ron más de 10.000  horas  de aprendizaje hasta lograr lo que hoy el mundo conoce. Aquí también cabe preguntarse ¿por qué los europeos, principalmente los jóvenes, hablan dos, tres, cuatro, cinco  y hasta seis idiomas? Puedo  decir,  porque lo obser- vé, que  la disciplina, la persistencia y el uso  óptimo del  tiempo, son  las causas principales. Alguien podría decir  que  los europeos tienen una  ventaja geográfica al tener  varios  países de  idiomas diferentes muy  cercanos como  Francia, Italia, Alemania, entre  otros.  Si este fuera  el argumento, entonces ¿por qué en Colombia no hablamos portugués e inglés?  Si bien  el coraje,  la disciplina, la persistencia, el conocimiento, la humildad, la sabiduría, la benevolencia, el creer  que podemos y el no temerle al fracaso, moldean un  nuevo paradigma que  nos fortalece nuestro ser interior y nos facilita volar,  no olvidemos que lo más importante para  volar es tener  un  sentido, en lo que  Viktor  E. Frankl9, en su libro  El hombre en busca  del sentido  último, llama  a la reflexión de “¿cuál es el sentido de mi vida?”. Todo esto es lo que en definitiva nos impulsa a volar.  Ahora  la pregunta final será: ¿Qué tan alto  tú  volarás?  parodiando a John  C. Maxwell10, en  su  libro  How High Will You Climb” ¡Sólo tú lo decides!


_______________________

*    Médico,  Jefe Convenios Docencia Servicio y Sistema de Seguridad y Salud en  el Trabajo  de la Fundación Hospital San Pedro;  Docente de la Universidad de Nariño.

REFERENCIAS

 

1.    PARKER, Alan (1984). Film Birdy, Internet

2.    VILASEC, Borja. (2014) El sinsentido común. Editorial Planeta Colombiana S.A, Bogotá,

3.    BOHAN, William F. (2008) El poder oculto de la productividad. Editorial Norma, Bogotá,

4.    GLADWELL, Malcolm. David y Goliat. (2013) Editora Tauros, Bogotá.

5.    TRACY, Brian. (2011) Plan de Vuelo. Editorial Taller del Éxito, FL, USA.

6.    SUN, Tzu. (2012) El Arte de la Guerra. Editorial Hidalgo Ltda., Bogotá,

7.     OPPENHEIMER, Andrés. (2014). CrearoMorir. Editorial, Penguin Random House Group Editorial, S.A.S, Bogotá.

8.    GLADWELL, Malcolm. (2012) Fuera de Serie (Outliers). Punto de Lectura, Bogotá,

9.    FRANKL, Víctor E. (2010).  El Hombre en Busca del Sentido último. Espasa Libros, S.L.U, Madrid.

10.  MAXWELL, John C. (2014). How High Will You Climb? New American Standard Bible, USA.