El síndrome de Burnout, también conocido como síndrome de desgaste profesional, de sobrecarga emocional o de fatiga en el trabajo, fue declarado en el año 2000 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un factor de riesgo laboral1. Este se ha estudiado principalmente bajo la definición de Maslach y Jackson, quienes lo describen como una forma inadecuada de afrontar el estrés crónico, sus rasgos principales son el agotamiento emocional, la despersonalización y la disminución del desempeño personal2-6, otra definición es la propuesta por Gil7 quien lo define desde la perspectiva psicosocial, como una respuesta al estrés laboral crónico caracterizado por una percepción de fracaso por parte de quien lo padece. Se presenta con mayor frecuencia entre aquellas ocupaciones que tienen contacto directo y constante con otras personas8, factores de riesgo ocupacional como condiciones de tensión, la labor en sus contenidos y niveles de responsabilidad, carga emocional en cada rol4,9.
Existe consenso entre algunos autores, que definen el contacto con personas o pacientes y su complejidad como causa de la aparición del síndrome, de ahí que el personal de enfermería presente comportamientos particulares en la prevalencia de síndrome de Burnout, dependiendo del tipo de servicio o área donde labore4,8,10-13.
El objetivo del presente estudio fue establecer la prevalencia del síndrome de Burnout en los profesionales de enfermería que laboran en la Orinoquia colombiana, comparando aquellos que trabajan en atención hospitalaria con quienes trabajan en áreas diferentes a la hospitalaria.
Tipo de estudio y población
Se realizó un estudio analítico transversal, el cual se llevó a cabo en profesionales de enfermería que ejercen su labor en la Orinoquia colombiana (Arauca, Casanare, Meta y Vichada). Se tomó una muestra de 100 sujetos, la cual fue de carácter no probabilística con muestreo por intención; los enfermeros se tomaron de los siguientes lugares de trabajo: diez de centros hospitalarios de segundo y tercer nivel, ocho de centros de atención primaria, seis de Secretarías Locales de Salud y tres de entidades del estado.
Proceso de medición y recolección
El procedimiento para la recolección de información fue mediante la aplicación de entrevista a los participantes en cada ciudad de residencia. El instrumento utilizado fue Burnout Maslach Inventory validado en Colombia en el 2004, por Chávez y Castrillón quienes obtuvieron una consistencia interna de 0,62 para agotamiento emocional, 0,72 para despersonalización y 0,76 para realización personal14,15, los criterios de inclusión fueron ser profesional de enfermería, que labore actualmente en el área clínica o de salud pública en la Orinoquia colombiana (Arauca, Casanare, Meta y Vichada) y que decida participar de manera voluntaria en el estudio. Los criterios exclusión fueron: que al momento del estudio trabajara de manera simultánea en el área de salud pública y clínica.
Análisis estadístico
Se realizó un análisis exploratorio para las variables cuantitativas, para determinar su distribución (valores extremos, simetrías, curtosis, tipos de distribución); para las variables cualitativas se analizaron frecuencias relativas (moda, datos erróneos y datos perdidos). Posteriormente, se analizó mediante estadística descriptiva, análisis univariado (proporciones, tendencia central y dispersión) y análisis bivariado, para lo cual se calculó razón de prevalencia, intervalo de confianza y significancia estadística (las variables se categorizaron usando la mediana como punto de corte). Para las variables numéricas se compararon las medias, la comparación de las variables cuantitativas se llevó por medio de t-student, para muestra independientes con varianzas iguales o desiguales, según sea el caso, (se evaluaó la normalidad con la prueba de Shapiro-Wilk e independencia). El análisis se realizó en SPSS, se consideró como significativo un valor p < 0,05. Para la estimación de parámetros se usaron intervalos de confianza del 95%.
Consideraciones éticas
El estudio fue revisado y aprobado por el Comité de Ética de la Universidad de los Llanos, de acuerdo a la Resolución 8430 de 199316) de la normatividad colombiana y a la Declaración de Helsinki. Este estudio se consideró de riesgo ético mínimo, se aplicó un formato de consentimiento informado previo a la obtención de la información, la participación fue voluntaria.
Las características sociodemográficas de los participantes se distribuyen así: El 90% pertenecen al sexo femenino; el 53% son solteros, el 22% casado y el 20% se encuentran en unión libre; el 54% tiene menos de 28 años; el 42% aún no tiene hijos, el 59% tienen menos de 6 años de experiencia laboral, 66% trabaja 8 horas o más al día, 65% brinda cuidado a 11 o más pacientes al día, el 27% posee simultáneamente dos empleos, el 85% tiene contratación laboral directa, 61% trabaja en una institución pública (Tabla 1).
Los enfermeros encuestados de la Orinoquia, mostraron una prevalencia síndrome de Burnout del 16%; la distribución según el área de trabajo evidenció que laborar en atención hospitalaria genera una prevalencia del 25,5%, mientras que los enfermeros que trabajan en áreas diferentes presentan una prevalencia de 6,1%. El 42% de los enfermeros que laboran en atención hospitalaria presentaron un alto cansancio emocional, el 38% una alta despersonalización y 30% elevada falta de realización personal. Los enfermeros de otras áreas presentan proporciones más bajas en las tres dimensiones: cansancio emocional (20%), alta despersonalización (26%) y falta de realización personal (24%) (Tabla 2).
Los resultados hallados en el cálculo de razón de prevalencia para las distintas variables presentaron diferencias estadísticamente significativas para el área de trabajo y la edad de los participantes. Se encontró asociación estadística entre laborar en atención hospitalaria asistencial (RP 4,2 IC95% 1,3-13,7 p=0,008), y ser menor de 28 años (RP 3,7 IC95% 1,1-12,1 p=0,017) (Tabla 3).
[i] * Valor de p, estimado por medio del test de Ji2.
Los profesionales con síndrome de Burnout presentan un promedio más alto para las variables: horas que trabaja al día, horas que trabajará en el mes, y un número de pacientes que asiste en una jornada laboral, para el número de pacientes se encontró diferencia en la comparación de medias (Tabla 4).
Condiciones del ambiente hospitalario y las características de la funciones de enfermería han hecho que esta sea catalogada como una profesión de riesgo y mayor prevalencia para el desarrollo del síndrome de Burnout5,17-19. En Colombia se han desarrollado investigaciones (en ciudades especificas), que se han orientado a describir la prevalencia del síndrome o sus factores asociados, se han realizado principalmente en docentes20,21) y en profesionales de la salud14,15,22-25.
La prevalencia global del síndrome de Burnout para la muestra tomada fue del 16%, en los profesionales que laboran en el área hospitalaria fue de 25,5%, presentaron una prevalencia superior en un 19% con respecto a aquellos que laboran en otras áreas.
La diferencia entre los que laboran en el área de atención hospitalaria, frente a los que trabajan en un área diferente, se explica por las características propias del trabajo hospitalario de enfermería: una mayor carga laboral (número de pacientes y tiempo de trabajo)19,24,26-28, carga emocional (exposición al dolor, la muerte) junto con la responsabilidad sobre el bienestar del paciente5,19 y la rutina diaria18,19. La menor prevalencia del síndrome en enfermeros que laboran en áreas no hospitalarias, también fue encontrada en un estudio realizado en Suiza, donde asocian este hallazgo a la autonomía laboral que se presenta en esta área29.
En Colombia se ha reportado diferentes prevalencias en profesionales de enfermería que laboran en el área de atención hospitalaria: 15,5% en Barranquilla23, 26,6% en Cartagena24, 24,4% en Ibagué30, 17,5% en Bogotá31, 9,1% en Tunja26, resultados que concuerdan con los hallados en el presente estudio, ubicando la prevalencia global de Burnout y la prevalencia de los profesionales que trabajan en el área de atención hospitalaria en la Orinoquia dentro de estos valores, pero más cerca de la prevalencia encontrada en Ibagué y Cartagena. El hallazgo de la asociación en mayores de 28 años ya fue descrito de igual manera en Cartagena y Boyacá24,32, aunque en los estudios referenciados para Barranquilla23 e Ibagué30 no se encontró ninguna relación y el realizado en Bogotá31 encontró que a mayor edad mayor prevalencia. La relación de la edad con la prevalencia encontrada en la Orinoquia es explicada por otros estudios que argumentan que existe una relación inversa entre la edad y este síndrome33, posiblemente asociada al afrontamiento eficaz con el tiempo32. En el resto de variables medidas en este estudio no se encontró significancia estadística para las asociaciones (>0,05).
El comportamiento de las variables sociodemográficas y laborales es similar a lo descrito por otros autores; en el presente estudio, el 90% de los encuestados pertenece al sexo femenino, como se ha encontrado en diferentes estudios5,17,23,24,26,27,30,31,34,35, desde 1860, cuando Florence Nigthingale direcciona a la enfermería a un nivel de profesión, hasta la actualidad, la función de las enfermeras en las instituciones de salud obedece al estereotipo del género femenino36. El estado civil predominante es ser solteros, seguido por estar casado, igual que lo encontrado en Ibagué30, pero en Bogotá31, Barranquilla23 y Cartagena24) esta condición es minoritaria, aunque el estudio realizado en la Orinoquia no encontró relación de la variable estado civil con la ocurrencia del síndrome, sin embargo, este ha sido asociado en un estudio realizado en Grecia18. El 58% de los enfermeros tenían al menos un hijo, cuando se exploró la razón de prevalencia para esta variable no se encontró asociación con la presencia del síndrome de Burnout, caso contrario a lo encontrado en los estudios realizados en Bogotá31, Cartagena24 e Ibagué30 donde encontraron relación entre tener hijos y la prevalencia del síndrome de Burnout.
Los enfermeros con síndrome de Burnout presentan un promedio más alto de horas de trabajo al día, y horas que trabaja en al mes, comparados con los que no fueron clasificados con este síndrome. En cuanto al número de pacientes que asiste en una jornada laboral, se encontró diferencia en la comparación de medias, estos hallazgos sobre el número de pacientes como factor relacionado con la prevalencia son descritos en los estudios ya mencionados en diferentes ciudades de Colombia.
Los profesionales de enfermería en la Orinoquia padecen del síndrome de Burnout, con mayor prevalencia en aquellos que laboran en al área de atención hospitalaria comparados con aquellos que trabajan en áreas diferentes y en los menores de 28 años, los enfermeros clasificados como positivos para el síndrome son los que atienden mayor número de pacientes en su jornada laboral.
Fuente de financiación
El proyecto fue financiado por la Universidad de los Llanos para la ejecución del protocolo, código C05-F03-010-2016, Proyecto VIAC-6823112015- Fomento a la investigación.
Conflicto de intereses
Los autores declaran que no existen conflictos de intereses.
A los enfermeros César Torres Muñoz y Oscar Alirio Torres por su apoyo en la ejecución del proyecto.