En relación a la categoría bienestar psicológico, se identificó que los
participantes tenían una tendencia a puntajes medios-altos, lo cual
indica una correlación directa entre las variables evaluadas, así, las
personas que están mejor preparadas para afrontar y resolver situaciones
y desafíos en la vida suelen experimentar mayor bienestar psicológico,
tienden a ser positivos, cuentan con habilidades para la regulación de
emociones, tienen mayores niveles de autoestima alta; lo cual les brinda
condiciones de equipamiento psicológico para percibir mayores niveles de
bienestar23.
El estudio da cuenta que los estudiantes universitarios ante los
diversos estresores psicosociales de la COVID-19, posiblemente tomaron
una actitud proactiva que les permitió en el despliegue de sus recursos
personales y anticiparse a problemas asociados a las consecuencias
generadas por la pandemia23.
Dentro de las dimensiones que componen al bienestar psicológico se
encontró que la variable propósito en la vida y autoconcepto, fueron las
que presentaron mayor prevalencia. El autoconcepto se relacionó con el
bienestar psicológico y a su vez, estuvieron ligados a los propósitos en
la vida24, por cuanto los
individuos con opiniones positivas sobre sí mismos se enfocaban más en
las metas y objetivos que tenían25 lo que favorece la identificación y
activación de recursos personales al momento de enfrentar una crisis.
Probablemente y pese a que las condiciones educativas se vieron
afectadas por el aislamiento social, los universitarios al tener claros
sus propósitos en la vida, seguido de un autoconcepto positivo, lograron
minimizar el impacto de los estresores, situación que facilitó el
proceso de adaptación a las condiciones de la emergencia sanitaria26.
En contraposición, las dimensiones que presentaron menor frecuencia
fueron autonomía y relaciones positivas, ambas afectadas y alteradas por
la COVID-19, puesto que al establecerse el aislamiento social
obligatorio, como medida de salud pública para contrarrestar la
propagación del virus, se restringió la interacción y la cohesión social
de los universitarios, generando un retorno abrupto al hogar, donde la
toma de decisiones recayó nuevamente sobre las figuras parentales;
situación que influyó sobre su percepción de autonomía, condición
experiencial básica en el pasaje de la niñez a la vida adulta27.
En efecto, la pérdida progresiva de la autonomía, sumada a la percepción
de aislamiento relacional, influye de manera negativa sobre el bienestar
psicológico; siendo uno de los factores mayormente reportados por los
universitarios como estresor psicosocial en el escenario de la
pandemia28.
En lo que respecta a las estrategias de afrontamiento, se identificó que
las más empleadas por los estudiantes fueron solución de problemas,
reevaluación positiva, evitación emocional y evitación cognitiva. En
relación a estas últimas se plantea que los sujetos que emplean la
evitación emocional y cognitiva posiblemente dejan de pensar en las
consecuencias negativas de la pandemia y anulan las emociones negativas
asociadas a la misma; de este modo los universitarios, tienden a
enfocarse en la solución y la reevaluación positiva de la situación29.
Lo anterior evidencia que los universitarios han transitado de
estrategias de afrontamiento evitativo a estrategias de afrontamiento
activo, lo que refleja la disposición progresiva de estos, a vislumbrar
la pandemia desde una perspectiva del aprendizaje; por el marcado locus
de control externo que tuvo la pandemia como abordaje psicosocial29.
Adicionalmente, en el estudio se identificó que las estrategias de
afrontamiento menos empleadas fueron la búsqueda de apoyo profesional y
espera. Esto puede deberse a que la pandemia claramente obstaculizó el
acceso a servicios de salud mental, de modo que los estudiantes recurren
a otro tipo de fuentes de ayuda a fin de afrontar los diversos
estresores. En relación con la espera, es evidente que los
universitarios tendieron a estrategias de afrontamiento activas por
sobre las pasivas, debido a la gestión de la propia autonomía y los
roles sociales que como adultos jóvenes había construido1.
Una vez descritos el nivel de bienestar psicológico y las estrategias de
afrontamiento empleadas por los estudiantes, se procedió a determinar la
asociación entre bienestar psicológico y estrategias de afrontamiento,
encontrando una asociación directa estadísticamente significativa entre
el bienestar psicológico y las estrategias solución de problemas,
búsqueda de apoyo social, religión, evitación cognitiva, reevaluación
positiva y negación, por lo que se debe tener en cuenta que los
universitarios presentan diferentes mecanismos para poder afrontar los
estresores psicosociales asociados a la pandemia, produciendo un efecto
de contención sobre las problemáticas asociadas al confinamiento, la
educación virtual y la progresiva afectación del nicho social30.
Posteriormente, al evaluar la asociación entre las dimensiones del
bienestar psicológico y las estrategias de afrontamiento se encontró
que, el autoconcepto tiene una asociación directa estadísticamente
significativa con las estrategias solución de problemas, búsqueda de
apoyo social, búsqueda de apoyo profesional, evitación cognitiva y
reevaluación positiva. De acuerdo a lo propuesto el autoconcepto
positivo está ligado con la integración social, lo cual facilita el
despliegue de la estrategia de búsqueda de apoyo social31, las relaciones positivas
con los otros y el mantenimiento de relaciones estables, configura una
importante fuente de apoyo social dentro de la pandemia32, siendo las relaciones
familiares positivas el principal factor protector, lo que le permite al
individuo la resignificación de estresores sociales y la reevaluación
permanente de las situaciones críticas, para poder hacer frente a la
misma33.
Por otra parte, las estrategias que se asociaron de forma inversa
estadísticamente significativa con el autoconcepto fueron espera,
evitación emocional, reacción agresiva y expresión de la dificultad de
afrontamiento. Un sujeto puede presentar un autoconcepto negativo cuando
se desarrolla en entornos donde prevalece la violencia verbal, física y
psicológica, puesto que, aprende a enfrentar situaciones mediante el
empleo de la violencia generando de este modo reacciones agresivas34. De igual manera, el
hallazgo da cuenta que en el contexto de la pandemia los universitarios,
despliegan la evitación emocional cuando ven afectado su autoconcepto,
de modo que logren salvaguardar la concepción y atribución positiva que
tienen sobre sí mismos, eso es evitar la confrontación familiar, las
dinámicas relacionales hostiles y precariedad económica derivadas del
confinamiento; a su vez, el autoconcepto familiar ejerce un efecto
positivo sobre el afrontamiento evitativo o activo; en ese sentido,
puede señalarse que el papel de estrategias de afrontamiento como la
evitación y la espera repercute de manera progresiva en la percepción y
opinión que los universitarios construyeron sobre sí mismos en la
pandemia35.
La segunda dimensión del bienestar psicológico son las relaciones
positivas, que se asociaron de manera directa con las estrategias de
afrontamiento de espera, evitación emocional, expresión de la dificultad
de afrontamiento y negación. En consecuencia, el distanciamiento social
y el confinamiento causaron una ruptura en las relaciones y dinámicas
sociales habituales, lo que condujo a percibir de manera creciente una
afectación en las relaciones positivas. Para algunos autores, el
establecer y mantener relaciones positivas con otras personas contribuye
a que el sujeto tenga confianza en los demás, con quienes puede expresar
la dificultad de afrontamiento, disminuir los efectos emocionales,
lograr la contención del estresor y afrontar efectivamente el
problema36.
En cuanto a la autonomía, se encontraron relaciones directas
estadísticamente significativas con las estrategias de afrontamiento
espera, evitación emocional, reacción agresiva y expresión de la
dificultad de afrontamiento. Se plantea que una persona autónoma puede
afrontar las dificultades de forma independiente enfocándose más en la
solución que en la emoción que trae consigo la situación, razón por la
cual se presenta la relación entre autonomía y evitación cognitiva37. Sin embargo, tras la
pandemia se ha podido identificar que la pérdida de autonomía puede
repercutir en que los universitarios expresen menos su dificultad de
afrontamiento a causa de la falta de control frente a los estresores y
un temor implícito en relación a la experiencia derivada de dichas
emociones38.
La cuarta dimensión correspondiente a dominio del entorno tuvo una
relación directa estadísticamente significativa con las estrategias de
afrontamiento solución de problemas, búsqueda de apoyo social y
evitación cognitiva, Hewitt et al39, plantean que un sujeto que presenta
una buena relación con las personas que lo rodean tiene mayor
posibilidad de percibir apoyo social a la hora de enfrentar una
situación estresante; que juntamente con la evitación cognitiva facilita
que los participantes tomen distancia de la situación y puedan disminuir
la reacción cognitiva y emocional38, es así como en relación a la pandemia,
los universitarios no solo buscan apoyo social, sino intentan
identificar la parte positiva del problema, tanto en el despliegue de
capacidades y recursos personales, como en la activación de fuentes de
apoyo familiar o social.
Frente a la dimensión propósitos de la vida se encontró una asociación
directa con las estrategias de afrontamiento solución de problemas,
búsqueda de apoyo social, religión, búsqueda de apoyo profesional,
evitación cognitiva y reevaluación positiva. Se plantea que, el contar
con apoyo social y profesional, el individuo dispone de los mecanismos
de afrontamiento adecuados para atajar los problemas y proyectar metas
en la vida, lo cual también puede darse desde la parte religiosa y
espiritual40.
En relación a la pandemia, las instituciones educativas se cerraron de
forma física, sin embargo, esto no fue obstáculo para que se abrieran
espacios de aprendizaje virtuales, las estrategias de afrontamiento del
individuo mantienen una relación sinérgica y proactiva, en virtud de la
cual las fuentes de apoyo pueden ayudar a que el individuo disponga de
los mecanismos de afrontamiento adecuados para atajar los problemas, de
modo que los estudiantes en el contexto de la pandemia pudieron evitar
cognitivamente la situación y la reevaluaron de forma positiva,
adaptándose con eficacia a la nueva realidad29.
En cuanto a la dimensión crecimiento personal se asoció de manera
directa con las estrategias de afrontamiento solución de problemas,
evitación cognitiva, reevaluación positiva y negación. El crecimiento
personal implica un continuo aprendizaje, por lo que en el escenario de
la COVID-19 los universitarios identificaron la capacidad para aprender
de las situaciones adversas experimentadas a partir del reconocimiento
de los propios recursos disponibles, con los cuales de manera progresiva
hicieron un tránsito de la negación, a la solución efectiva de
problemas, lo que llevo a recuperar el locus de control interno y
percibir mayores niveles de bienestar psicológico en medio de la
pandemia41.
Esto pone de manifiesto que el bienestar subjetivo en tiempos de la
COVID-19, incrementa en la medida de que los sujetos emplean estrategias
centradas en la resolución de problemas y búsqueda de apoyo por parte de
un tercero, quien puede orientar la conducta del individuo y buscar en
conjunto la solución al conflicto. Frente a lo anterior una estrategia
empleada por los participantes fue la religión, la cual permite que los
sujetos por medio de la oración puedan sentir el apoyo de otro ser para
poder enfrentar la situación adversa40.
Finalmente, en lo que confiere a la relación directa con la negación y
evitación cognitiva, se plantea que los universitarios tienden a
eliminar o neutralizar los pensamientos negativos asociados a la
COVID-19 y se centran en los pensamientos positivos. De este modo, surge
la reevaluación positiva del fenómeno en la que el sujeto busca aprender
de la situación adversa, identificando aquellos elementos y aprendizajes
positivos que dejó la pandemia, los cuales facilitan el afrontamiento
efectivo de los estresores asociados41.