Los Valores en la Educación en el Próximo Milenio
Resumen
Quizá convenga iniciar el tema acuciante, urgente y decisivo, pero al mismo tiempo inabordable, que se me ha propuesto para esta conferencia, en términos de periodismo deportivo. En una entrevista reciente se suscitó entre la periodista y el experto entrevistado el siguiente intercambio de opiniones:
En otras palabras, la lógica del deporte de alto nivel y la lógica neoliberal coinciden.
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Citas
Agradezco a la Dra. Lucinda Rivas López y a la Mtra. Anita Barabtarlo su cordial invitación a dictar esta conferencia magistral en el «2o. Coloquio Nacional de Innovaciones y Estrategias Educativas», Morelia, Michoacán, 30 de agosto de 1996, organizado por la Red Nacional de Innovaciones y Estrategias Educativas. En este trabajo he intentado la difícil articulación entre las dimensiones oral y escrita. Por un lado, oral para la exposición en público, evitando el mayor pecado de un docente: aburrir. Por la otra, un texto publicable, para que en ulterior lectura sirva con notas y referencias de orientación para los docentes interesados en profundizar aspectos de la reflexión ética.
«Los atletas de alto nivel son organismos cibernéticos que rompen las fronteras humanas»: el antropólogo Jean Marie Brolun entrevistado por Anne Marie Mergier en: Proceso. México, 4 de agosto de 1996, Nro. 1031, p. 72.
Michel Foucault: Vigilar y castigar; Nacimiento de la prisión. México, Siglo XXI, 19 ed., 1991, p. 204. Una lectura complementaria de gran interés es Jeremías Bentham: El Panóptico. Incluye también una entrevista a Michel Foucault: «El ojo del poder» y un trabajo de María Jesús Miranda: «Bentham en España». Madrid, La Piqueta, 2 ed., 1989, 145 págs.
Ibidem, p. 206.
Ibidem, p. 230.
Gracias a los intercambios que me pen-nite la dirección de tesis, he caído en la cuenta de este aspecto a propósito del proyecto de maestría de MaciejZietara.
Guillermo Michel: Entre la revolución y la utopía; Comunicación y educación. México, Paradigmas Ediciones, 1992, p. 12.
Platón: La República. Versión, introducción y notas de Antonio Gómez Robledo. México, UNAM, 1971, p. 213.
Cf. Bernard Mandeville: La fábula de las abejas o los vicios privados hacen la prosperidad pública.
Comentario crítico, histórico y explicativo de F.B. Kaye. Trad. de José Ferrater Mora. México, FCE, 1982, 721 págs.
Para este aspecto sigo sugerencias interesantes de Angel Ocampo.
Margarita Pisanno F.: «Niñas buenas, niñas malas. ¿Qué pasa con la moral?» en: Ximena Bedregal (coord.), Etica y feminismo. México, Ediciones La Correa Feminista, 1994, p. 3.
Viaje inacabado; La axiología educativa en la Postmodernidad. Barcelona, Ediciones CEAC, 1990, p. 57.
Jesús Avelino de la Pienda: Educación, axiología y utopía. Oviedo, Universidad de Oviedo, [s.f.], p. 11, nota 4 (los énfasis son del autor). La axiología se cultivó con ahínco en Nuestra América en los primeros años de este siglo. El enfoque generalmente no rebasó los esfuerzos por caracterizar los valores en abstracto con vagas referencias y alusiones insuficientes a los contextos en que operaban. Ejemplos sugestivos de estos esfuerzos teóricos son, por ejemplo, las siguientes obras: José Vasconcelos: Ética. México, Botas, 1939, 632 págs.; Coriolano Alberini: Escritos de Ética. Mendoza, UNC, 1973, 227 págs.; Rafael Virasoro: Vocación y moralidad; Contribución al estudio de los valores morales. Santa Fé, Librería y Editorial Castellvi S.A., 1949, 177 págs.; Miguel Bueno: Principios de ética. México, Patria, 1973, 276 págs. Un giro fundamental en la discusión puede ejemplificarse como sigue: «... carece de validez apodíctica toda determinación de un bien en cuanto tal, así sea en la antigua noción de «naturaleza» de un ser, o en cualquier elaboración que se haga de la idea de un «bien intrínseco»; pues todo bien en sí es descubierto como tal en y desde la vigencia de un ethos, y éste es esencialmente aporético en tanto esencialmente inapodíctico, pues la fragilidad de su vigencia deja siempre abierto el preguntar por su validez» (Mario Sambarino: Investigaciones sobre la estructura aporético-dialéctica de la eticidad. Montevideo, Universidad de la República, 1959, p. 276).
Aunque considera corno fundamento de la valoración el psicologismo, es interesante el texto introductorio de Paula Gómez Alonso: La ética en el siglo XX. México, UNAM, 1958, 180 págs.; para la visión de la ética en perspectiva anglosajona y particularmente la discusión en este siglo cf. Alasdair Maclntyre: Historia de la ética. Barcelona, Paidós, 4 reimpr., 1991, 259 págs.; para las relaciones entre ética y moral y algunas consecuencias jurídicas fue importante Günther Patzig: Ética sin metafísica. Buenos Aires, Alfa, 1975, 179 págs.; de lo mejor que se ha escrito recientemente en castellano es el texto de Javier Muguerza: Desde la perplejidad (Ensayos sobre la ética, la razón y el diálogo). Madrid, FCE, 1990, 709 págs.; sintético e interesante para ver una perspectiva usamericana sobre valores y educación es el artículo de John T. oldthwait, «Values and education: Helping history along» en: The Journal of Value Inquiry. Dordrecht, Kluwer Academie Publishers, Vol. 30, 1996, pp. 51-61.
Cuidadosamente ha desarrollado este punto en su trabajo de doctorado María Teresa Yurén Camarena: Eticidad, valores sociales y educación. México, UPN, 1995, pp. 191 y ss.
Remito a mi «¿Teoría de la utopía?» en: Utopía y Nuestra América. Quito, Abya-Yala, en prensa. Complementario de este aspecto puede considerarse el debate que hemos mantenido con mi colega y amigo David Crocker: «La metacrítica de Horacio Cerutti a las filosofias latinoamericanas de liberación » en: Cuadernos de Filosofía; Anuario del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la Facultad de Humanidades. Guatemala, Universidad de San Carlos e Guatemala, Año IV, Nro. 6, 1993, pp. 64-111 y mi respuesta en la misma revista: «¿Crítica a la metacrítica o dificultades de interpretación? Respuesta provisoria a David Crocker», Año VII, nros. 7-8, 1995, pp. 82-95. Para ética del desarrollo cf. el volumen colectivo editado por J. Ronald Engel y Joan Gibb Engel: Ethics of Environment and Development; Global Challenge, International Response. Tucson, The University of Arizona Press, 1990, 264 págs. He tocado algunos tópicos en mi ponencia: «Ética para el desarrollo. Entre el NAFTA y Chiapas» en: Universitas Philosophica. Bogotá, año 12, nros. 23-24, diciembre 1994-junio 1995, pp. 41-49.
La peregrinación de Bayoán; Diario recogido y publicado por Eugenio María de Hostos en: Obras completas; Edición crítica. Santo Domingo, República Dominicana, Instituto de Cultura Puertorriqueña/Editorial de la Universidad de Puerto Rico, Vol. 1, Literatura, Tomo I, 1988, pp. 68-69.
No quiero inducir la idea de repudio a los avances tecnológicos sin más. Me parece más productiva la sugerencia de que «Lejos de tener una actitud de rechazo de la informática por parte de la educación, el desafio consistiría en ir más allá de su simple utilización descubriendo las posibilidades educativas más profundas que los nuevos medios técnicos pueden ofrecer» (Antonio Monclús Estella: Didáctica y planificación de la educación: utopía y praxis. Barcelona, Humanitas, 1987, p. 129). Claro que hay que mantener la distinción entre tecnologías y técnicas.
«Freedom and material security are thúígs that most people prize highly, but ideological zeal tends only to increase human suffering -and many of the currently fashionable policy prescriptions are based on nothing more than zeal. Every time I apply for a govermnent research grant, I am required to sign a fonn declaring that I will not experiment on human subjetcs. I wish governments had to do the same» («The Neoliberal Fallacy» en: Journal of Democracy. Washington, D.C., Vol. 3, Nr. 3, july 1992, p. 57; cito de la traducción preparada por David Crow).