América y el Mundo Moderno
Abstract
América Latina ha necesitado de una determinada filosofía, propia, diferenciable de otras, que corresponda a su historia, a su práxis, constitutiva de ésta, en la que Latinoamérica se reconozca. No estamos identificando esta filosofía necesariamente con un proyecto histórico a realizar sino más bien con lo realizado y con su sentido: "Es, pues, ya tiempo de comenzar la conquista de una conciencia nacional, por la aplicación de nuestra razón naciente, a todas las fases de nuestra vida nacional..." afirma Juan Bautista Alberdi (1810-1884); "Que sus elementos, mal conocidos hasta hoy, no tienen una forma propia y adecuada. Que ya es el tiempo de estudiar su naturaleza filosófica, y vestirles de formas originales y americanas . Que la industria, la filosofía, el arte, la política, la lengua, las costumbres, todos los elementos de civilización conocidos una vez en su naturaleza absoluta comiencen a tomar francamente la forma más propia que las condiciones del suelo y que la época les brindan. Depuremos nuestro espíritu de todo color postizo, de todo traje prestado, de toda parodia, de todo servilismo. Gobernémonos, pensemos, escribamos y procedamos en todo, no a imitación de pueblo alguno de la tierra, sea cual fuere su rango, sino exclusivamente como lo exige la combinación de las leyes generales del espíritu humano, con las individualidades de nuestra condición nacional" ("Fragmento preliminar al estudio del Derecho.")