En días pasados tuve la oportunidad de participar en el proceso de selección de aspirantes a ingresar al programa de especialización en Docencia Universitaria, que con tanto prestigio ofrece la Universidad de Nariño desde hace 10 años y una sorpresa agradable para mí fue encontrar entre los aspirantes, cerca de una veintena de profesionales de la salud: médicos, odontólogos y enfermeras, de reconocido prestigio en su campo y con una amplia trayectoria a nivel local, regional
e internacional. A lo largo de las diferentes entrevistas fui entendiendo los motivos por los cuales intentaban acceder, manifestaban tener un amplio deseo de acertar, de responder con idoneidad a un eventual ejercicio de la docencia universitaria, ya que en la ciudad, se habían abierto las opciones Para el programa de Medicina, dinamizadas ahora, con el nuevo programa que ofertara esta Universidad. En el conversatorio sostenido pude establecer que a ellos les inquieta saber todo lo referido a la enseñanza: como adelantar un proceso de aula que les permita una "transmisión de conocimientos" Clara, segura, científica;